Ser coherente no quiere decir estar acertado, si no razonar de forma consistente de acuerdo a tus posiciones; pero a menudo si uno es coherente todo el rato es más fácil que se esté acertado que si uno sólo es coherente a ratitos. Cuando casi en una sola frase se es coherente primero e incoherente después pierde uno mucha credibilidad y es fácil pensar en aquello de la elasticidad de los argumentos y en lo de que razonar es arrimar el ascua a la sardina propia.
El presidente fundador del PP, D. Manuel Fraga, ha dicho hoy que es un «disparate» y un «error gravísimo» investigar las desapariciones de la Guerra Civil y de la dictadura franquista. Le entiendo. Me parece que desde su punto de vista es normal que piense así y que lo diga. Es coherente. Fraga, ocupó la cartera de Turismo bajo el régimen de Franco.
Pero cuando habla de Garzón dice: «Es un disparate que un señor se autodefina competente en un asunto que es muy discutible que tenga competencia nadie puesto que ya hubo leyes de amnistía» No Señor, ahora es usted incoherente, o es discutible que tenga competencia nadie o es un disparate que alguien se defina competente. ¿Me sigue profesor Fraga? Si es discutible no es un disparate. Se le vuelve a ver el plumero D. Manuel.
Ya veo que no sólo le cabe el estado en la cabeza, sino que le caben razonamientos incoherentes y coherentes a la vez casi. ¡Qué cabeza!
D. Manuel, ya ha hecho usted mucho por este país. De verdad. Ha traído a la derecha más rancia a la democracia y eso se lo agradecemos todos. Le deseo lo mejor. Se ha ganado ya el merecido descanso. ¿Por qué no se jubila?
octubre 18, 2008 at 3:41 pm
Estamos pendientes de esa Ley de memoria historica que parece que no llega, sobre todo porque fue así, hubo un pacto tácito en estos treinta años de democracia en callar (como una ley de punto final, esa ley de amnistía) pero sobre todo esto implicaba un sacrificio mayor para los vencidos, aunque hoy dia las víctimas siguen, pues son las victimas del terrorismo las que hablan, pero no debemos olvidar a las otras, las que sufrieron la guerra y la posguerra.
Por otra parte cuando se habla de coherencia lógica del lenguaje son categorías lógicas de actualización del lenguaje pero también debe primar la adecuación y la conformidad de éste con la realidad. Es por ello que la consistencia a veces salta y se pierde, si falla la actualización y el grado de adecuación con la realidad.
Hay muchas cosas de las que no hemos sido conscientes al menos las generaciones de la democracia, pero si hemos de olvidar que sea para todos igual:
es cierto que se cometieron injusticias por ambos bandos y si se quiere hacer un entendimiento habría que tratarlas a todas por igual, pero ello no quiere decir que se olvide y que fueron una vez más los vencidos los que más perdieron.
Aunque los verdaderos perderdores de la guerra civil fueron los anarquistas en verdad, porque ellos renunciaron después a un partido, ahora los perdedores serían las víctimas de Eta, que son las víctimas de la democracia.
Sincerily yours!!
Stillness of my soul,
Esther