Me hace gracia – poca gracia la verdad – con la naturalidad que aceptamos los juegos malabares de los políticos y comunicadores con el léxico.
Voy a exponer algunos conceptos sencillos y bien conocidos; perdonad que hoy vuele tan bajo.
¿Qué es la velocidad? El espacio que se recorre en una unidad de tiempo.
¿Qué es la aceleración? Cuando la velocidad varía en función del tiempo, llamamos aceleración a la variación de la velocidad por unidad de tiempo. Cuando la aceleración es negativa la podemos llamar decelaración o, si queréis, desaceleración.
¿Qué es la sobreaceleración?: la derivada de la aceleración; o sea si se acelera cada vez más o se desacelera cada vez menos hay sobreaceleración positiva; si se acelera cada vez menos o se desacelera cada vez más negativa.
¿Qué demonios es entonces la desaceleración de la economía?
La magnitud, ahora, no sería el espacio sino el tamaño de nuestra economía nacional; su derivada con respecto al tiempo, sería el crecimiento o el decrecimeinto de la economía, o sea, la velocidad con la que crece o decrece ésta; dependiendo de si se crece o si no se crece, la derivada es mayor o menor que cero. Del mismo modo, la segunda derivada sería la aceleración del crecimiento; si se crece y se crece cada vez más o si se decrece y se decrece cada vez menos sería aceleración positiva del crecimento, si se crece pero se crece cada vez menos o se decrece pero se decrece cada vez más sería desaceleración.
Entonces qué está pasando con la economía: que crece, pero crece menos de lo que crecía, o sea crece cada vez menos. A eso, por no llamarlo frenazo del crecimiento, lo llaman desaceleración del crecimiento.
El problema es la tercera derivada, o sea si el frenazo es cada vez mayor, como está ocurriendo. Tendríamos que estar hablando de que la desaceleración de la economía es creciente. O que la sobreaceleración de la misma es negativa.
Cuando las economías dejan de crecer, o sea decrecen, o tienen crecimento negativo, por más de dos trimestres es cuando se dice que entrar en recesión. Es lo que todo el mundo cree que va a ocurrir en los USA.
Nosotros estamos lejos de eso, pero la tendencia es preocupante. ¿Entraremos en decrecimiento de las economía, si se confirmasen las tendencias?: corremos el riesgo. Yo creo, de todos modos, que, en España, saldremos de esta mejor que otros, pero: ¡abróchense los cinturones!
mayo 5, 2008 at 11:19 pm
Los políticos y sus eufemismos!!. Ahora los trasvases son derivaciones temporales y las crísis, «desaceleraciones»…
Pienso que a la vista de datos macro,(crecimiento del PIB, confianza del consumidor, etc), la tan manida desaceleración se esta produciendo en cuesta «arriba», con lo cual la pérdida de velocidad equivale a a frenada.
Lo que más preocupa de esto, es que las autoridades (Solbes y su equipo) han venido haciendo, en contra de la mayoría de opiniones autorizadas, un diagnóstico erróneo de los males de nuestra economía. Y claro ante un diagnóstico erróneo, dificilmente se puede poner un tratamiento correcto. Para encontrar soluciones efectivas, lo primero es reconocer el problema, y eso, a día de hoy, sigue sin producirse.
Me gustaría equivocarme, pero tengo la sensación de que llega una época de ajuste fuerte, que equilibre los excesos de estos últimos años. Veremos.
Yo también me voy ajustando el cinturón….y me tomo una pastilla contra el mareo…
Salu2.
JL
mayo 6, 2008 at 5:51 am
Querido José Luis,
Ojalá que los políticos tuvieran algo que ver en la situación económica… o mejor… mejor que apenas influyan en la economía.
Ni la bonaza que hemos disfrutado estos años se podía atribuir al buen gobierno del PP ni al del PSOE, ni la crisis actual se puede atribuir al desgobierno del PSOE. Para mí la política económica de los dos últimos gobiernos de Aznar, con Rato al frente, y la anterior y la siguiente a esas dos, con Solbes como Vicepresidente económico, no se diferenciaron apreciablemente entre sí. Vamos, para ser claro, que opino que Solbes hubiera sido un buen Ministro de Economía en el gobierno del PP y Rato bueno también en el gobierno del PSOE. Y, además, me alegro de que así sea.
Ahora bien, unos y otros, cada vez que les conviene, llaman a las cosas como piensan que les convendría llamarlas, en lugar de por su nombre. Sobre todo en campaña electoral, unos y los otros me aburren. Pese a todo, al final voy y voto, pero me aburren.
mayo 6, 2008 at 1:52 pm
Me parece muy bueno el post, sobre todo la parte de las derivadas aunque reconozco haberme perdido un poco (sería que ese día estaba en la cantina jugando al mus).
Bueno pues a lo que iba, mi sensación es que la cosa se para, yo trabajo en una empresa que vende producto eléctrico y se ha notado muchísimo desde el día 15 apróximadamente. Hasta ahora el negocio ha ido viento en popa pero ahora apenas suena el teléfono. Conozco empresas relacionadas con la construcción que se dedican a hacer ñapas. Y si nos vamos al consumidor y común de los mortales ayer dijeron los datos de familias en bancarrota. Si nos vamos a los mercados la bolsa no acaba de tirar. Quiero decir que no hace falta irse a los datos macroeconómicos para ver que la cosa anda chunga y esto no lo arregla ni el PSOE ni el PP, a buenas horas. Nuestra economía depende ahora del Chiquilicuatre (Rodolfo el del chiqui chiqui)
Toca abrocharse el cinturón y que pase el chaparrón.
Un saludo.
mayo 6, 2008 at 2:08 pm
De acuerdo Oscar, las consecuencias de la evolución de la macroeconomía se palpan muy bien en cualquier sitio, como en los taxis, hablando con los taxistas, entre otros, y por poner sólo un ejemplo. Lo del parón de la construcción es tremendo, tan tremendo como el crecimiento sostenido, espectacular e irracioinal que ha tenido durante muchos años. Los efectos de la crisis en los sectores más ligados a ella van a seguir siendo muy grandes.
De todas formas, ¿qué ha pasado en este puente? Parece que, en cierto modo, seguimos con ganas de consumir por encima de lo razonable en este contexto. ¿Significará algo respecto de la evolución del consumo, que era el otro gran motor de nuestra economía?
Faltaría algo muy importante para prever qué pasará y es lo realtivo la evolución de nuestro déficit exterior.
Lo del chiki chiki es premonitorio: los políticos van a tener que hacer el brikidans, el crusaito, el maikeljakson y el robocop para lidiar este asunto. Lo veremos.
mayo 6, 2008 at 5:37 pm
Estimados
Quiero expresar primero mi satisfacción por poder disfrutar de este foro y blog y mi agradecimiento, profesor, por hacerlo posible. Pero vuelvo a la física, que ya ha mostrado que tambien nos abre camino en esta situación. Tambien se define la aceleración como el cambio en la velocidad y dirección del movimiento que experimenta una masa sobre la que actua una Fuerza. Hablamos de la desaceleración de nuesta economía (la masa), pero debemos buscar la fuerza (o suma de fuerzas) que la provoca y la fuerza que debe reorientar la dirección y la velocidad de nuestra economía, porque sin esta nueva fuerza que ‘corrija’ la situación, si sólo logramos que dejen de actuar las fuerzas actuales, el movimiento de nuestra economía se quedará lógicamente en un estado peor (hablamos de desaceleración) que el inicial. Tranquilo, no voy a entrar a analizar las fuerzas, pero si recurro a las poco detalladas explicaciones de los políticos y a las opiniones intencionadas en la prensa, se distinguen fuerzas internas (muchas, me da lo mismo cuales) y externas (me dan lo mismo casi todas, excepto esa que esgrimen algunos de la recesión norteamericana y sobre la que desde España creo que poco podemos hacer). Según el lado opinante se incide en las fuerzas internas o externas, al gusto. A los que gustan de poner como causa a esas fuerzas externas, yo recomendaría que empezara a trabajar en desarrollar fuerzas internas que contrarresten las actuales y devuelvan nuestra masa a un estado de movimiento acelerado y bien dirigido. De otra manera, parece que sólo quedarían hipotéticas fuerzas externas (no controlables por nosotros) que nos devolvieran a un movimiento adecuado. Y si el actual ministro/gobierno/ad-lateres creen que este último es el caso, que piensen entonces que ellos mismos sobran por que no pueden actuar en esas fuerzas externas. De otra manera, si creen que la solución está en fuerzas internas deberían recapacitar si realmente corrigen a las fuerzas internas que pudieron llevar a esta situación.
Perdón por el tostón
Un saludo
mayo 6, 2008 at 7:06 pm
Me encanta el paso que das de la cinemática a la dinámica. Me recuerda mis libros de física de PREUNIVERSITARIO – Dios, qué viejo soy, entonces no había todavía COU, pero me acuerdo de mi profesor de Física del CEU de San Pablo, Sr. Coloma, y de mis compañeros y compañeras de entonces, sobre todo de María Aurora Regúlez: ¡inolvidable! –
Toda aceleración necesita una fuerza detrás, sino el movimiento pasa a ser uniforme, es cierto, pero me dan miedo los aprendices de brujo que acaban desatando unas fuerzas que luego no controlan. No propugno la inacción, sólo la prudencia; más que intentar contrarrestar las fuerzas hay que saber encauzarlas, dirigirlas, moderarlas. Ese es el papel de los políiticos, más que el de convertirse en los prestidigitadores del lenguaje.